Desde muy pequeñito aprendí a cortar la carne con la mano izquierda. Me parecía una estupidez tener que cambiar el tenedor de mano cuando había que cortar algo... Salvo, claro está, que el estúpido fuera yo, o mi familia, al no enseñarme que el tenedor se usa siempre (haya cuchillo o no) con la mano zurda; esto es algo de lo que dudo, ahora que me pongo a pensar en ello, pues el tenedor se pone a la izquierda del plato... Tendré que consultar un manual de urbanidad y buenas maneras, creo que por aquí había uno de la Falange...
Por cierto, hablando de Falange... Curioso asunto éste del pacto entre Falange Auténtica e Izquierda Unida en Ardales (Málaga), sobre todo porque nos hace caer en la cuenta de que lo importante son las personas, antes que las ideologías, pero también porque nos hace recapacitar sobre la multitud de matices y diferencias que encontramos dentro de todo aquello que nos propongamos analizar, especialmente las cuestiones humanas, entre ellas las políticas, los partidos, los movimientos... Y si ya nos interesa más, nos pone en contacto con la historia y descubrimos cosas curiosas, como que hubo varias oposiciones falangistas al régimen de Franco, algo que a muchos no interesará, acostumbrados a meter en el saco "fascista" a toda posición política vehemente... Y cierta parte de razón tienen, ya que no faltan personajes que pasan de un lado a otro de las trincheras como Mussolini, Pío Moa, Jorge Vestringe, Dragó, e incluso movimientos enteros como el Partido Carlista (que de conservador pasó a socialista autogestionario, aunque monárquico, por supuesto). Bueno, el caso es que la Falange Auténtica surge, al menos como idea, cuando Franco en 1937 crea el Movimiento Nacional o Falange Española Tradicionalista y de las JONS, unión de los carlistas (tradicionalistas) con FE de las JONS, que a su vez era la unión de Falange y las JONS, ambas de ideología nacional-sindicalista y republicana, es decir, que algo de mano izquierda tienen los chicos. Manuel Hedilla, dirigente a la sazón de Falange, fue condenado a muerte por conspirar contra Franco, aunque luego fue indultado; en los sesenta, con el Régimen más relajado, vuelve a la carga para intentar frenar el avance del capitalismo en España, pobre hombre. Falange Auténtica se proclama seguidora de los principios de Hedilla. Hubo, al menos, otra oposición falangista durante la dictadura, y ésta de mayor eficacia y calado: es lo que se conoce como "el grupo de Burgos", una serie de intelectuales que lucha contra la perversión militarista, católica y capitalista del Régimen, lo que buscaban era un Estado Nacional (Unido) y Proletario; entre esos intelectuales estaban Pedro Laín Entralgo, Torrente Ballester, Luis Rosales, Eugenio D'Ors... Pero bueno, si queréis saber más sobre esto buscad en la wikipedia y en http://www.nodulo.org/ec/2007/n061p11.htm . De todos modos cuidado con lo que leéis, no vaya a ser que, como yo, ya no sepáis dónde tenéis la derecha ni la izquierda.
En cualquier caso no creo que el manual de urbanidad de la Falange dijera nada acerca de lo siguiente que aprendí a hacer con la mano izquierda, salvo que me podría quedar ciego (a este respecto conviene ver el muy instructivo cortometraje de Raúl Atreides titulado
Ratones).
Posteriormente intenté aprender a escribir con la zurda, pero resultaba muy trabajoso y el resultado no era tan satisfactorio como el onanismo, así que abandoné mis pretensiones de ambidestreza escolar.
Pasaron muchos años hasta que aprendí a hacer algo nuevo e interesante con la izquierda: ¡un kinder! No, fue al instalar el ordenador en la tienda de mis padres. Por razones de espacio el ratón debía quedar a la izquierda, de modo que o cruzabas el brazo derecho, postura con la que terminabas dolorido, o utilizabas la izquierda, postura con la que terminabas mareado (de tanto seguir por la pantalla a la errática flechita guiada por la no menos errática mano zurda); pero eso ocurría solo las primeras veces, luego te acostumbras... De hecho ahora toda la familia maneja el ratón con la izquierda. Después (o antes, ya no recuerdo, pero es indiferente) aprendí a hacer ramos de flores (la tienda es una floristería), y aprendí a hacerlos con las dos manos, cuando me cansaba de sujetar con un brazo me lo cambiaba. Esto a mi padre le puso de muy mal humor ya que yo siempre me he negado a trabajar en la tienda y, mucho más, a trabajar con las flores (sí, ya sé que es un oficio muy bonito, que las flores son preciosas, etc., etc.), y cuando me puse a ello, ¡hala, con las dos manos, con chulería! Para barrer o fregar también uso las dos manos indistintamente.
...Claro que, ahora que recuerdo... varias veces en el colegio tuve la mano derecha vendada. Una vez me hice una fisura en uno de los dedos al ir a coger un rebote en baloncesto; sí, también sé que no soy muy alto, pero saltaba mucho, me pasaba el día saltando, de hecho, lo que me pasó otra vez fue que salté para colgarme de la barra de un toldo. En la barra ponía en letras naranjas y mayúsculas "PELIGRO, NO COLGARSE", pero las barras de los toldos no son muy anchas, así que ya me diréis lo grande que podía ser el dichoso anuncio. El toldo pertenecía a una tienda de la calle Bravo Murillo, al lado de un antiguo cine de sesión continua (reconvertido en centro comercial) al que la gente guarrilla iba a hacer sus cosillas (nosotros lo descubrimos al ir a ver dos películas, fijaos si me acuerdo por lo que me impresionó, "Doble cuerpo" y... ¿"El ninja blanco"?, esta última con Franco Nero), cosillas que si no andamos listos nos caen encima. Bueno, a lo que iba, pues el HIJO DE LA GRAN PUTA del dueño de la tienda, o sea él, no su hijo (o quizá fue su hijo, me da igual, me cago en los dos), había colocado pinchos en las barras del toldo. Yo, con diez u once años, salté, me agarré y una de las púas se me clavó en un dedo, pero al caer, la púa lo desgarró a lo largo... ¡QUÉ DOLOR! Lástima que en aquellos tiempos (los 80), no estaban de moda las denuncias, el culpable eras tú por colgarte de donde no debes. En fin, poco me pasó, ya que me colgué con las dos manos: de los ocho dedos que utilizas para colgarte sólo uno cayó en púa. Así que a urgencias, gammaglobulina antitetánica, zurcido y para casa con el dedo hecho una porra. Tiempo después me entró la congoja hipocondríaca de si podían haberme pegado el sida con la gammagl...
A decir verdad, no recuerdo si la gammaglobulina me la pusieron esa vez u otra en la que me atravesé un pie con un tornillo que unía las uralitas de un tejado... Sí, como veis casi todos mis accidentes están relacionados con las alturas, menos mal que no me dio por el trapecio... Con las alturas y con la bici; mi abuela, que en paz descanse, decía "Paquito coge bici, Paquito se pega hostión", y no es que me fallara el equilibrio, qué va, es que iba muy deprisa o por sitios muy chungos (otro día os cuento historias de la bici). Esta vez iba a rescatar un balón que se nos coló.
Sí, quizá fuera a través de todas esas veces como mi mano izquierda fue adquiriendo destreza, valga la contradicción, pues "destreza" procede de "diestra", de "saber hacer", pues "las cosas se hacen con la derecha" y se hacen "a derechas", como si los zurdos las hicieran "torcidas". Diversos estudios consideran que solo existe alrededor de un 10% de la población que es zurda. Razón por la cual el mundo está hecho para los diestros, pero lo perverso del asunto es que, sistemáticamente, a lo largo de la historia se ha intentado imponer a los zurdos el uso de la mano derecha. Pero al ser una característica fisiológica en la que el hemisferio derecho es el dominante, frente a los diestros, en que el dominante es el izquierdo (bueno, hay polémica sobre el asunto, porque al parecer no todos los zurdos poseen una lateralización cruzada), al tratar de forzar a una persona zurda a hacer las cosas con la derecha nos vamos a encontrar con ciertas reticencias y cierta torpeza por su parte (como cuando a los diestros nos obligan a hacerlo con la izquierda). De ahí que, precisamente, tanto "zurda", como "izquierda", sean palabras que, en su origen euskaldún signifiquen "inflexible, pesado" y "mano equivocada" respectivamente.
Es decir, que la izquierda se asocia con el error, la torpeza. ¿Y qué decir del equivalente latino, siniestra? Indica el lado oscuro, el reverso tenebroso de la fuerza, concepto que en la tradición judeocristiana está emparentado con el error, el error que comete Luzbel al pretender ser más grande y brillante que Dios, el error que le condena a ser el príncipe de las tinieblas. En el día del Juicio Final Dios sentará a su derecha a los justos y a su izquierda a los pecadores... La justicia... Sus procedimientos se estudian en la carrera de Derecho, no de Izquierdo. Lo derecho es lo justo, lo recto, lo que se encamina al bien, lo siniestro es lo opuesto. Curiosa forma de pensar la de los latinos... Siniestra, diríamos, pues a los zurdos durante la edad media se les consideraba endemoniados, de ahí que hasta hace bien poco a los niños zurdos se les quisiera enseñar a usar la derecha... Y todo ello a pesar de que los guerreros zurdos eran muy apreciados en los ejércitos, pues podían atacar por la izquierda a sus oponentes. Así pues, se asocia la izquierda (incluso la política) con lo siniestro, oscuro, equivocado, malvado, mientras que la derecha se asocia con la claridad, la luz, la verdad y la vida... Por eso Cristo se sienta a la derecha del Padre... Lo que no entiendo es por qué a los toreros se les denomina "diestros", cuando son más siniestros que otra cosa, por muy bien que lo sepan hacer.
Pues bien, como ya sabéis, hace un mes más o menos, me levanté con el pie izquierdo... Por cierto, cosa que siempre hago, ya que mi cama está a la derecha de la habitación y si quisiera levantarme por el otro lado me daría con la rodilla derecha en la estantería. Nos fuimos al campo y mi mala pata resbaló sobre la piedra, de modo que se me salió el hombro derecho (pero todo esto lo cuento en
El Purgatorio). La cuestión es que a partir de entonces tuve que empezar a hacer las cosas con la mano izquierda, ya que la otra estaba en cabestrillo. De hecho, aunque ahora ya me lo han quitado y escribo con las dos, este artículo empecé a escribirlo con una sola mano, lo cual es un coñazo... Bueno hoy toca hablar de lo diestro y lo siniestro en tanto que dualidad maniquea, pero esta dualidad también existe en los órganos genitales: ¿qué preferís, algo que sea "la polla" o algo que sea "un coñazo"? Y no es que yo pretenda que cambiemos el uso del lenguaje, pero sí que podíamos hacernos más consciente de por qué decimos lo que decimos, de dónde procede el uso de las palabras, etc. Otros y otras pensarán distinto, suscribiendo aquello de Nietzsche (creo), "temo que no vamos a librarnos de Dios, porque aún continuamos creyendo en la gramática". Y no es que carezcan de razón, es que simplemente resulta muy cansado, como lo de andar poniendo continuamente os/as. Yo lo hago sólo de vez en cuando y que me perdonen las que se sientan ofendidas.
¿Por dónde iba? Ah, sí. Todo he tenido que hacerlo con la izquierda. Desde afeitarme y lavarme los dientes hasta escribir alguna cosilla. Y lo curioso del asunto es que me ha resultado bastante fácil apañarme, salvo para cosas en las que necesitara de las dos manos... A decir verdad había algo que me resultaba difícil, algo simple, pensaréis: limpiarme el culo. No sé por qué y tampoco entraré en detalles por deferencia a las almas sensibles y poco dadas a la escatología... Por cierto, otra palabra, "escatología", que no podemos perder de vista, ya que posee una doble raíz griega, una que alude a la función fisiológico-excretora y otra que alude al más allá, pero claro, ¿quién no encontraría metáforas y metonimias entre dichos conceptos, aparte del ya consabido "el más allá es una mierda" o "más allá solo hay mierda"?
Continuando con la fisiología neurológica parece que el lado izquierdo del cerebro es el que está implicado en las funciones del pensamiento lógico-matemático y lingüístico, mientras que el hemisferio cerebral derecho controla funciones como «la visión y la memoria visual, el sentido espacial, la apreciación de la forma y del color y la creatividad [...]
«Hay muchas teorías sobre cómo ser zurdo afecta a cómo piensa una persona. Una divide a los pensadores zurdos y diestros en dos campos: simultáneos visuales y secuenciales lineales. Aunque no sabemos completamente cómo funcionan los distintos sistemas del cerebro humano, de acuerdo con esta hipótesis, las personas diestras procesan la información de manera "secuencial lineal" en el que un esquema debe completar su procesamiento antes de que se pueda comenzar con el siguiente.
«En cambio, los zurdos procesan la información con "simultaneidad visual", modo en el que varios esquemas se procesan simultaneamente.
«Un efecto lateral de estos modos de procesar la información es que los diestros necesitan completar una tarea antes de empezar la siguiente. A los zurdos, en contraste, les conforta cruzar varias tareas, para lo que tienen mayor habilidad. Esto les hace aparecer (a la mayoría diestra) como si no terminasen nada. Alternativamente, los zurdos tienen una excelente habilidad multitarea, lo que quizá esté en el origen de las anécdotas que sugieren que son más creativos.
«Las personas diestras procesan la información usando el "análisis", que es el método de resolver un problema descomponiéndolo en piezas y analizando estas una por una. En contraste, los zurdos procesan la información usando "síntesis", en donde se resuelve un problema como un todo, intentando usar un método de relaciones para resolver el problema.
«Finalmente, ser zurdo no es un "todo o nada". El estilo de procesamiento opera como un contínuo donde algunas personas son más "visualmente simultáneas" y otras son más "lineales secuenciales".