zanjas.profundas@gmail.com

miércoles, 28 de julio de 2010




Fin de fiesta

Vaya por delante mi posición: estoy a favor de la abolición de las corridas de toros.


Se trata de un paso hacia adelante en la extensión de la ética, una ética ideal, que como tal pocos cumplen.


Se trata de un paso hacia adelante en la uniformidad cultural globalizada, uniformidad en la que los pueblos van homogeneizándose culturalmente al compás del consumo capitalista y sus instancias asociadas, la Política, la Justicia... 


Se trata de un paso hacia adelante en la consolidación del mito, el símbolo patrio, el binomio toro-torero. 


Al igual que el bandolero o el almorávide, el vaquero del oeste americano o el mongol de las estepas, toda figura que pretenda convertirse en mito ha de perder su presencia real, su manifestación en este mundo, de modo que diluidas sus características en el limbo de lo ideal puedan predicarse de individuos reales que, por supuesto, ni se acercan a la figura analogada. España es el país de los toreros, pero los guiris vienen aquí y como no vayan a la Fiesta no se encuentran con ninguno. El torero actualmente es una figura real con la cual nadie se puede comparar. Cuando se haya abolido la Fiesta, los machos ibéricos seremos investidos con el aura del mito y llevaremos un traje de luces imaginario. Con camiseta roja, eso sí.


Un ataque a la cultura, un ataque a la libertad, dicen por ahí. ¿Y la libertad del toro? Preguntamos nosotros ¿Es libre de vivir o morir? Otros se visten de ecologistas: se extinguirá el toro de lidia. En fin, a mí que me gusta andar por el campo no me gustaría encontrarme con un bicharraco de estos en libertad.


Canarias y Cataluña... Ya solo faltan 15 comunidades por abolirla, aunque los defensores de la Fiesta están pasando a la ofensiva declarándola "bien de interés cultural", si bien no se trata de un "bien" (valga la redundancia) sino de una "acción" o una serie de acciones, una institución, etc. Pero tampoco vamos a empezar con disquisiciones terminológicas.


Hay por ahí leyes y sentencias contra el maltrato animal: si le pegas de palos a un perro, si te comes un lagarto, si haces volar a un burro en parapente, puedes acabar en el trullo. Pero si acuchillas a un toro, si despeñas a una cabra, si decapitas a un pollo colgado cabeza abajo no estás maltratando al bicho sino participando de una tradición. Mas ¿acaso no hay tradiciones que deben ser prohibidas? ¿No debe ser prohibida la ablación del clítoris en África? ¿No debe ser prohibido el sometimiento de la mujer al hombre?


Ah, pero aquí se trata de animales, no de personas, que tienen menos derechos. ¿Y quién define a los sujetos de derecho? Depende de la filosofía del Derecho que sostengamos: ¿positivismo, iusnaturalismo? ¿Y si empezamos a extender los derechos al mundo animal? ¿No acabaríamos por ser vegetarianos? ¿No acabaríamos por no poder experimentar nuevos medicamentos? ¿Dónde poner el freno a la extensión?


Como cantaban Siniestro: 
"Pueblos del mundo
extinguíos
dejad que continúe la evolución
esterilizad a vuestros hijos
juntos de la mano
hacia la extinción"





El toreo ha muerto, larga vida al toro.





Por cierto, esto anda circulando por la red:



Tal vez hayas oído que la fiesta de los toros es un arte, pero no lo es... Es una Ciencia... La ciencia de la Tortura. Nada en la fiesta brava es genuino, solo el dolor.


24 Horas antes de entrar en la arena, el toro ha sido sometido a un encierro a oscuras para que al soltarlo, la luz y los gritos de los espectadores lo aterren y trate de huir saltando las barreras, lo que produce la imagen en el publico de que el toro es feroz, pero la condición natural del toro es huir NO atacar.


Le recortan los cuernos para proteger al torero. Le cuelgan sacos de arena en el cuello durante horas. Lo golpean en los testículos y en los riñones, le provocan diarrea poniendo sulfatos en el agua que bebe para que llegue débil y desorientado al ruedo. Le untan grasa en los ojos para dificultar su visión y en las patas una sustancia que le produce ardor y le impide mantenerse quieto para no deslucir la actuación del torero.


Se eligen a caballos que ya no tienen valor comercial, por que el animal muere en 3 o 4 corridas a lo mucho, es muy habitual que el animal sufra quebraduras múltiples de costillas o destripamientos. Se les coloca un peto simulando que se les protege, pero en realidad se trata de que el publico no vea las heridas al caballo que con frecuencia presentan exposición de vísceras.


Si el torero percibe que el toro embiste con mucha energía, ordena al picador hacer su trabajo: Consiste en desangrar al toro para debilitarlo, clavándole en el lomo una lanza que destroza músculos (trapecio, romboideo, espinoso y semiespinoso, serratos y transversos de cuello). Lesiona, además, vasos sanguíneos y nervios. Todo esto para que el torero pueda brindar la expresión artística que se supone debe tener este espectáculo.


Un solo puyazo podría destrozar al toro, por eso se hace en tres tiempos "para mayor goce de la afición."


Las banderillas aseguran que la hemorragia siga, intentan colocarlas justo en el mismo sitio ya dañado con los ganchos de metal. El gancho se mueve dentro de la herida con cada movimiento del toro y con el roce de la muleta, el peso de las banderillas tiene precisamente esa función. Algunas tienen un arpón de 8 cm, y se les llama "de castigo", se las clavan cuando ha logrado evadir la lanza del picador. Las banderillas prolongan el desgarre y ahondamiento de las heridas internas. No hay límite al número de banderillazos: tantos como sean necesarios para desgarrar los tejidos y la piel del toro.


La pérdida de sangre y las heridas en la espina dorsal impiden que el toro levante la cabeza de manera normal, y es cuando el torero puede acercarse. Con el toro ya cerca del agotamiento, el torero no se preocupa ya del peligro y se puede dar el lujo de retirarse del toro después de un pase especialmente artístico, echando fuera el pecho y pavoneándose al recibir los aplausos del público Cuando el toro alcanza este estado lastimero, el matador entra en el ruedo en una celebración de bravura y machismo a enfrentarse a un toro exhausto, moribundo y confundido


El toro es atravesado con una ESPADA de 80 cm. de longitud, que puede destrozarle el hígado, los pulmones, la pleura, etc., según el lugar por donde penetre en el cuerpo del animal; de hecho, cuando destroza la gran arteria, el toro agoniza con enormes vómitos de sangre. A la hora de matar, si el toro corre con un poco de suerte muere de una estocada, pero no como se piensa de una estocada al corazón si no que la espada penetra pulmones y diafragma, a veces una arteria mayor, y de ahí la hemorragia que se aprecia del hocico y de la boca. A veces mueren ahogados en su propia sangre….



El toro, en un intento desesperado por sobrevivir, se resiste a caer, y suele encaminarse penosamente hacia la puerta por la que lo hicieron entrar, buscando una salida a tanto maltrato y dolor. Pero entonces lo apuñalan en la nuca con el DESCABELLO, otra larga espada que termina en una cuchilla de 10 cm. A pesar de estos terribles tormentos, el animal no suele morir de inmediato por su gran fuerza, pero finalmente cae al suelo, porque la espada a ido destrozando sus órganos internos...


Maestros? Artistas? Valientes? O Ignorantes, Asesinos y Cobardes…


Lo rematan con la PUNTILLA de 10 cm. con lo que intentan seccionarle la médula espinal, a la altura de las vértebras atlas y axis.


El toro queda así paralizado, sin poder siquiera realizar movimientos con los músculos respiratorios, por lo que muere por asfixia, muchas veces ahogado en su propia sangre, que le sale a borbotones por la boca y la nariz.


Después que le destrozan las vertebras, el toro pierde el control sobre su cuerpo desde el cuello hacia abajo, sin embargo hacia arriba se mantiene intacto, por lo que esta conciente de todo el horror y de cómo es arrastrado fuera del ruedo.



Antonio Gala, escribió en el dominical de El País del 30 de julio de 1995 un artículo en el que confesaba su "conversión" a anti-taurino.
"Y de repente [el toro] miró hacia mí. Con la inocencia de todos los animales reflejada en los ojos, pero también con una imploración. Era la querella contra la injusticia inexplicable, la súplica frente a la innecesaria crueldad…"


La conmiseración con los animales está íntimamente unida con la bondad de carácter, de tal manera que se puede afirmar que quien es cruel con los animales no puede ser buena persona (Schopenhauer) 


Sólo los psicópatas gozan con el sufrimiento de otros, eres tú uno de ellos? Reflexiona! Recházala!! esta es una tradición que NO debe continuar


No asistas a corridas de toros
No apoyes a políticos, artistas y comunicadores asociados a esta Crueldad…
No consumas productos de empresas que los patrocinen
Y lo mas importante... Enseña a tus hijos el respeto por los seres vivos…

lunes, 12 de julio de 2010




¿Dónde estabas tú?


Eso le preguntaban los míticos "Ángeles del Infierno" a Dios en una de las canciones del álbum "666":

¿Dónde estabas tú?
cuando estalló la bomba en Hiroshima
¿Dónde estabas tú?
cuando estalló la guerra de Vietnam
¿Dónde estabas tú?
cuando morían de hambre en Etiopía
¿Dónde estabas tú?

Eso nos preguntan a nosotros en cada momento histórico, convertidos en dioses (al menos por lo que toca a la ubicuidad) gracias a las maravillas de las tecnologías de las telecomunicaciones, al tanto de todo lo que sucede en cada momento y en cada lugar del mundo.

¿Dónde estabas tú el día del atentado contra las Torres Gemelas?
¿Dónde estabas tú el día en que Obama ganó las elecciones?

¿Dónde estabas tú el día en que España ganó el mundial de fútbol?

Cenando con mi chica, duchándome... Y con la tele apagada.

¿Acaso eso me hacía menos dios respecto del Acontecimiento? Ni mucho menos, pues el vecindario nos mantenía informados con sus gritos de horror, de alivio, etc. Intentábamos permanecer al margen pero no podíamos... Acaso tampoco queríamos.

Al final, tras los gritos de júbilo y de celebración por el gol de Iniesta, encendimos el ojo que todo lo ve y vimos los últimos cuatro minutos; suficientes para segregar altos niveles de adrenalina. Después las celebraciones de los jugadores, la entrega de la copa... Y a la cama (donde no hubo celebración de la victoria). En la calle ruido, gritos, pitidos, petardos.

Esto era solo un respiro, un sueño. Mañana volveremos a la cruda realidad: paro, crisis, guerra, terrorismo, muerte, enfermedad... Zanjas profundas.

¿Dónde estarás tú?





Zanjas profundas en tu mente
Zanjas profundas en tu mundo
Zanjas que nos separan
Zanjas que nos escinden
Zanjas en las que caemos
a veces sin poder salir
___________________________