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jueves, 25 de noviembre de 2010




La paz mundial (Siniestro Total)

Es medianoche fíjate

No queda nadie en el bar

Es el momento ideal

Para ponerme el disfraz

No tengo fe en la humanidad

Pero a los pillos pillaré

Y a los malos moleré

A palos con muy grande afán

Un supehéroe sin moral

No obedece a la ley

Que total para qué está

Que está pá vaya usted a saber





Un superhéroe sin moral

Que follen a la paz mundial





Soplaré y soplaré

Y al Estado derribaré

No hay nada que agradecer

Yo esto lo hago por maldad

Atracaré el Banco Mundial

Asaltaré el Santander

De paso el BBVA

Y al final el Bundesbank

Me gastaré todo el botín

En fiestas para seducir

A la mujer de Sarkozy

Que no está nada, nada mal





Un superhéroe sin moral

Que follen a la paz mundial





Le meteré el puño por

El tracto anal al Premio

Nobel de la Paz ¿que para qué?

Pues para ver de qué es capaz

Nadie dirá nada de mí

Que no habrá ya quien pueda hablar

Esculpiré mi santa faz

En algún monte nepalí

Y si la Historia me ha de juzgar

Que vaya con mucho cuidao

Que me la cargo a ella también

Y a sus colegas de sarao





Un superhéroe sin moral

Que follen a la paz mundial

jueves, 18 de noviembre de 2010




En la zanja del final feliz

Hace poco vimos "El secreto de los hermanos Grimm", película de 2005 cuyo director es el afamado Terry Gilliam (12 monos, Brazil, El rey pescador, etc.)


Se trata de una fábula acerca de la vida de dichos hermanos que, por supuesto, nada tiene que ver con su historia real, pues mientras que en la realidad fueron dos reputados lingüistas, en la fábula de Gilliam son dos buscavidas que engañan a la gente crédula del campo; lo único en común es que eran recopiladores de cuentos.


Van engañando a la gente haciéndoles creer que les liberan de brujas y maldiciones varias hasta que se topan con una auténtica maldición que al final logran conjurar.


La cuestión que aquí queremos plantear es la inadecuación entre la forma y el contenido de la película, sobre todo su contenido final. Por lo que toca a la forma nos parece que es impecable: europa central a principios del siglo XIX, ambientación perfecta, atmósfera lóbrega, oscuridad, suciedad, crueldad; sólo algunos chistes de humor negro vienen a empañar una estética gótica aderezada con detalles de cuentos, supondremos que todos ellos, de los hermanos Grimm: Caperucita, Hansel y Gretel, Blancanieves...


De hecho, tanto la estética como la acción van haciéndose más oscuras a medida que se desarrolla la historia: un hombre lobo rapta a chicos y chicas del lugar y los deposita en tumbas alrededor de una torre; está a las órdenes de una malvada bruja que necesita a doce jóvenes para recuperar su belleza; los Grimm se lanzarán a su rescate. Esta oscuridad cada vez más acuciante contrasta con ese humor puntual.


Contraste que llega a su punto álgido en el momento en que la bruja hace que un hermano mate al otro; el que queda vivo rompe el espejo mágico y la torre se derrumba con bruja y hermanos dentro, si bien a esta escena le falta dramatismo debido a la ausencia de una música adecuada. El efecto es impactante, inesperado (como cuando matan a Di Caprio en "Infiltrados"), creíamos que estábamos ante una película de aventuras y nos encontramos con una tragedia.


Pero va Gilliam y la caga: uno de los hermanos se levanta de entre las ruinas, besa a la buenaza de la historia (que está en una de las tumba) y se despierta, ésta besa al otro hermano y no sabemos con quién se queda. Un desastre de final.


¿Acaso el final auténtico era el otro y los productores le dijeron que nanay, que arreglara/alegrara el asunto? Ya sabemos que la película es un homenaje a los cuentos, pero, ¿no estaremos acaso ante una burla de esos finales felices? Es más, ¿acaso puede haber algún otro homenaje (sincero, irónico, burlesco...) de los cuentos después de la saga de Shreck? La respuesta es tajante: NO. Con dicha saga se alcanza la cima y la perfección del género.


Unos días más tarde vimos "Susana (demonio y carne)", de Buñuel (año 1950)... Y el mismo defecto: el final feliz. Una chica se escapa del reformatorio y recala en la hacienda de una familia bien avenida. La chavala está muy maja y todos los hombres se enamoran de ella, jóvenes y viejos, creándose tensiones entre ellos, lo cual aprovecha la muy astuta para "labrarse" un porvenir en la hacienda: seduce al patrón, que despide al capataz y se enfrenta con su propio hijo (que también estaba enamorado de la niña. 


En esta historia el personaje de Susana no es muy realista, carente totalmente de pudor, de moral, sin conflicto interno, al contrario que los demás personajes, que sí los tienen. Evidentemente representa la encarnación del mal, el demonio, aunque el mal no necesite ninguna encarnación, basta presentarlo como un conflicto difícilmente resoluble.


La cuestión está en que la mujer pilla al marido con las manos en la masa (de Susana) y se lía la de Dios es Cristo; menos mal que aparece por allí el capataz que, despechado, acude a las autoridades para denunciarla (pues conocía su procedencia); llega con los policías y estos se llevan a la prenda.


La siguiente escena es la del marido dispuesto a abandonar la casa, asumiendo su responsabilidad, pero la mujer le detiene y terminan todos comiendo juntitos como si nada hubiera pasado.


Para Gema este final consiste en una crítica al estamento de los terratenientes mejicanos que continúan como si nada hubiera pasado para seguir llevando la vida que tenían, aún a costa de la hipocresía moral.


No digo yo que no sea así, pero en tal caso la imagen del final no debería haber sido la de una familia feliz, sino lo contrario: el padre se negaría a abandonar la hacienda y terminarían todos comiendo cabizbajos y sin hablarse; el perdón, en todo caso, para más adelante.


Otro final alternativo podría haber sido la marcha efectiva del patrón. Su mujer e hijo, dolidos y enojados, le hubieran dejado marchar. Lo cual tampoco excluye el perdón posterior.


En fin, lo que no puede ser es que, después de lo ocurrido, el perdón sobrevenga ipso facto, eso no es realista, y aunque sabemos que Buñuel venía del surrealismo, sigue sin ser un final adecuado.


Quizá sea el propio concepto de "final" el que sea inadecuado para ser aplicado a una historia, pues siempre queda la pregunta de "¿y después qué?". ¿Se tiraría Susana toda la vida en el reformatorio? No. Saldría en dos o tres años. ¿Qué haría? ¿Se vengaría? En todo caso podría hablarse de finales parciales correspondientes a la muerte de cada personaje, lo cual no es precisamente algo feliz. Las historias, las aventuras, han de acabar porque la obra es finita, pero esos universos creados, imaginarios, virtuales, no tienen fin (por eso luego hacen segundas y terceras partes; que sean peores que las primeras eso es otra cuestión).





Así que ya sabéis: vivieron felices (a ratos) y comieron perdices (entre otras cosas;, a veces incluso tuvieron que ayunar, que la cosa se puso fea).

domingo, 14 de noviembre de 2010




Sor Juana Inés de la Cruz en la zanja del machismo

Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis:


si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal?


Combatís su resistencia,
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.


Queréis con presunción necia
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.


¿Qué humor puede ser más raro
que el que falta de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?


Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.


Opinión ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata
y si os admite, es liviana.


Siempre tan necios andáis
que con desigual nivel
a una culpáis por cruel
y a otra por fácil culpáis.


¿Pues cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende
y la que es fácil enfada?


Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y quejaos enhorabuena.


Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas,
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.


¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada,
la que cae de rogada
o el que ruega de caído?


¿O cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga
o el que paga por pecar?


Pues ¿para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.


Dejad de solicitar
y después con más razón
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.


Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo.


Sor Juana Inés de la Cruz


Wikipedia:
Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana, más conocida como Sor Juana Inés de la Cruz, (San Miguel Nepantla, Nueva España —actualmente México— 12 de noviembre de 1651 - Ciudad de México, 17 de abril de 1695) fue una religiosa católica, poetisa y dramaturga novohispana del Siglo de Oro español. Cultivó la lírica y el teatro, así como la prosa. Por la importancia de su obra, recibió los sobrenombres de el Fénix de América, la Décima Musa o la Décima Musa mexicana.


A muy temprana edad aprendió a leer y a escribir. Perteneció a la corte del virrey de Mancera. En 1667 ingresó a la vida religiosa a fin de consagrarse por completo a la literatura. Sus más importantes mecenas fueron los Marqueses de la Laguna, virreyes de la Nueva España, quienes publicaron sus obras en España. Murió a causa de una epidemia el 17 de abril de 1695.


Sor Juana Inés de la Cruz ocupa, junto a Juan Ruiz de Alarcón y a Carlos de Sigüenza y Góngora, el lugar más destacado de la literatura novohispana. En el campo de la lírica su trabajo se adscribe a los lineamientos del Barroco hispano en su etapa tardía. La producción lírica de Sor Juana, que supone la mitad de su obra, es un crisol donde convergen la cultura de una Nueva España en apogeo, el culteranismo de Góngora y la obra conceptista de Quevedo y Calderón.


La obra dramática de Sor Juana va de lo religioso a lo profano. Sus obras más destacables en este género son Amor es más laberinto, Los empeños de una casa y una serie de autos sacramentales diseñados para representarse en la corte.


martes, 9 de noviembre de 2010




Carlos Palomino en la Zanja del Fascismo

Se acerca el 20-N:







Este tema grabado en el CSO La Traba, producido por Yadrat y en el que han colaborado los compañeros de La Plataforma (con la cesión de imágenes) y Mavi, la madre de Carlos Palomino. Ha sido creado para recordar los crímenes cometidos y apoyar con su difusión a la Asociación de víctimas del racismo, el fascismo y la homofobia, fundada por Mavi, tras el asesinato de su hijo.


La canción “Fuertes” se encuentra dentro del álbum VOX POPVLI, el segundo disco de música benéfica de Eu Libre. org
Seguiremos luchando hasta que arda el último vestigio del fascismo.




Puedes decargarte el tema “Fuertes” gratuitamente desde estos enlaces.


Por favor, difunde este homenaje a la memoria de las víctimas.
Porque el mejor homenaje es continuar la lucha.
Porque no hemos olvidado lo que ocurrió.
Y porque aquí no se rinde nadie.



El video de la muerte de Carlos Palomino
Cargado por innerpendejo. - Vídeos de noticias del mundo entero.

sábado, 6 de noviembre de 2010




En la zanja de la propiedad intelectual: los antiguos contra ella

[...] puesto que sólo nos ha llegado un texto que, efectivamente, permite integrar a Hiparco en el corpus de los autores hedonistas y justifica la clasificación de su autor entre los discípulos de Demócrito.


El tratado de Hiparco [Sobre la alegría o el bienestar] podría provenir de imitaciones, género muy practicado en la época antigua, en la que no existía el culto a la propiedad literaria, la pasión del derecho de autor ni la religión de la novedad, todo lo cual ha conducido al hábito contemporáneo de citar entre comillas. En aquella época en que se reconocía la autoridad de un maestro, cualquiera se apoyaba abiertamente en sus tesis para escribir una obra a su manera y firmarla con su propio nombre sin que nadie le acusara de plagio. Abundan los "pseudo-", y es menester deshacer el ovillo: un texto firmado por Platón no es forzosamente de Platón, pero seguramente procede de su inspiración, pese a la cantidad de distorsiones que haya podido cometer la subjetividad del epígono.


(Michel Onfray, "Contrahistoria de la filosofía")


Ummmhh, no sé para qué citamos, si estamos totalmente de acuerdo con sus palabras.


Sí, sí lo sabemos: aparte de que sufrimos una deformación académica, creemos que citar las fuentes de los textos e ideas es una buena práctica ya que permite a los lectores acudir a dicho autor, el cual puede tener más textos e ideas interesantes (quizá más que sus reproductores, en este caso nosotros).


Pero de ahí a pagar por consumir esa idea... Las ideas son fluídos que se transfieren entre las personas, se multiplican y se transforman. El problema en realidad no está en el pago por el consumo, sino en el cobro por la producción: un autor realiza una obra (de esas que llamamos, quizá erróneamente, inmateriales: textos, canciones...); la pregunta es: ¿cuánto y hasta cuándo debe cobrar por ella? Si un escultor vende una obra, cobra una vez (aunque sea a plazos) un precio fijado de antemano; ¿no debería ocurrir lo mismo con los cantantes, cineastas y literatos?


Ya sé que el problema está en la industria y que no es lo mismo una productora cinematográfica que una editorial. Y que no es lo mismo el problema del plagio, al que alude el texto, que el del pago de los derechos de autor por el consumo, pero bueno, todo ello está relacionado.


¿No debería existir acaso una entidad gestora, probablemente estatal (nunca la SGAE), que comprara la producción de los artistas para luego distribuirla gratuitamente entre los ciudadanos? Jeje, ¿habría en tal caso que pagar a cualquiera que se pajease intelectual o artísticamente? ¿No debería, entonces, existir una censura para acceder al limbo de los protegidos por el Estado-mecenas? ¿Y cuáles serían los criterios de esa censura?


¿Acaso no nos colocan bodrios en la 2?


¿Acaso no existen demasiados impostores que pretenden vivir del cuento?


¿Acaso no existen demasiados "artistas"? (Por supuesto, claro que somos artistas/intelectuales frustrados, no hace falta que lo planteéis como si fuera una idea vuestra).


¿Acaso no debería ser el arte una actividad ociosa, nunca profesionalizada, realizada durante el tiempo que nos deja el neg-ocio? (Claro, claro, también sabemos que deberíamos trabajar menos horas). Un ejemplo de este arte gratuito serían los graffiteros o grupos musicales como el Reno Renardo, que cuelgan sus discos gratuitamente en la red, intelectuales blogueros (no como nosotros)...


Ah! Maravillosos tiempos estos de la mercancía digital...


"Pero qué vamos a hacer
cuando apaguen internet"
(Def Con Dos)






Zanjas profundas en tu mente
Zanjas profundas en tu mundo
Zanjas que nos separan
Zanjas que nos escinden
Zanjas en las que caemos
a veces sin poder salir
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